¿Para qué se utiliza la barrica en los vinos?
La barrica es un recipiente de madera con una capacidad de 225 litros que reúne multitud de ventajas, tanto técnicas como funcionales, hasta tal punto que desde hace siglos fue el elegido para madurar los grandes vinos en Francia. Solo los grandes vinos pueden conservarse y envejecer en barrica: todos los de calidad inferior se conservan en recipientes de mayor tamaño.
La barrica modifica las características organolépticas del vino. El gusto peculiar que le da la madera de roble ha influido de manera positiva en el consumidor, que le ha otorgado su favor. Un fenómeno que ha creado escuela y se ha convertido en punto de referencia para los viticultores recién llegados que, como consecuencia, han visto en la barrica el instrumento para añadir calidad a sus productos.
En la actualidad la barrica no es ya un simple recipiente, sino que se ha convertido en todo el mundo en el método para refinar los grandes vinos. El mercado de exportación de barricas, inicialmente inexistente (en tiempos, en cada región había bodegas que empleaban la madera de la zona, y no era especialmente importante el tipo utilizado), se ha desarrollado y ampliado mucho.
Es una buena idea tener en la bodega barricas de roble de Allier junto con otras de roble de Limousin o de otras procedencias. Naturalmente, cada vino tiene sus características y el resultado puede ser mejor con un tipo de roble u otro.
Originalmente, dadas las dificultades de transporte, la elección quedaba limitada a la madera disponible en la región.
En la actualidad, las maderas más buscadas son el roble de Limousin y el de Allier, además de otros menos conocidos procedentes de los bosques de Tronçais, Nevers, Fontainebleau, Blois, Pupille, Compiêgne y los Vosgos.
El roble de Limousin, aunque se usa también para los vinos, es sin embargo mejor para los destilados: la calidad y la procedencia de la madera resultan en verdad fundamentales para estos, y son objeto de estudios en profundidad.
Para el vino, la madera más utilizada es el roble de Allier, aunque aporta aromas menos delicados que el roble de Limousin.
Le gusta cocinar con los mejores ingrediente y utilizar los mejores utensilios de cocina. Aprendió a cocinar en MasterClass de la mano de los mejores chefs del mundo como Gordon Ramsay, Thomas Keller y Massimo Bottura. Desde el año 2010 se inició en el mundo del vino y las bebidas espirituosas, donde descubrió que sus vinos favoritos son los de Napa Valley, California, Estados Unidos.